Cuidar de la salud bucodental de los más pequeños es fundamental, ya que, al igual que los adultos, corren el mismo riesgo de padecer ciertas enfermedades periodontales y problemas de salud.
Una de las afecciones más comunes en niños es la caries dental, que suele ser, normalmente, consecuencia de una mala higiene oral o del consumo excesivo de ciertos alimentos ricos en azúcares.
La caries dental es una enfermedad bacteriana que provoca la desmineralización del esmalte dental, debido a los ácidos que genera la placa bacteriana. Por eso, es importante cepillarse los dientes después de cada comida y acudir al odontopediatra regularmente.
A continuación, te epxplicamos detalladamente qué son las caries, cuáles son sus principales causas y cómo poder evitarlas.
¿Qué es la caries?
La caries dental es una enfermedad crónica que causan las bacterias de la placa dental. Estas bacterias generan unos ácidos que provocan la desmineralización del diente, debilitándolo y dañando el esmalte o la superficie dental.
Si la caries no se trata a tiempo, puede extenderse a la dentina y la pulpa (las capas más profundas del diente), causando dolor, infección y, en ocasiones, la pérdida de alguna pieza dental.
Las caries en niños son también conocidas como caries rampante o del biberón, ya que suele desarrollarse entre los seis meses y los cinco años.
Este tipo de caries son bastante agresivas, puesto que avanzan con gran rapidez y pueden ocasionar graves consecuencias en la dentición permanente.
¿Cuáles son las causas de las caries en niños?
Son diversos los factores que causan las caries en niños, entre ellos destacan:
- Falta de higiene bucodental: la nula o escasa higiene oral es uno de los factores clave que puede provocar caries dentales. Por eso, es fundamental que los niños adquieran buenos hábitos desde pequeños, donde se cepillen los dientes después de cada comida e incluyan el uso del hilo dental.
- Malos hábitos alimenticios: una dieta rica en azúcares y carbohidratos favorece la aparición de caries.
- Bacterias cariogénicas: este tipo de bacterias forman parte de la placa dental y se transmiten a través de la saliva. Por este motivo, hay que minimizar ciertos hábitos como probar o soplar la comida del bebé, limpiar el chupete con la propia saliva o darle un beso en la boca.
- Caries del biberón: debe su nombre al uso prolongado del biberón, ya que estos líquidos acaban acumulándose en los dientes y encías, causando, así, las caries.
- Falta de flúor: el uso de flúor resulta eficaz a la hora de prevenir una caries, ya que ayuda a fortalecer el esmalte dental.
Cómo detectar la caries dental en niños
Es importante detectar una caries dental a tiempo, sobre todo en los dientes de leche, ya que influirá sobre la dentición permanente.
Al principio, el niño puede no presentar ningún síntoma, puesto que las caries suelen avanzar lentamente. Por este motivo, es necesario acudir al dentista regularmente y evitar, así, la aparición de caries o algún tipo de daño en la estructura dental .
Los síntomas más característicos para detectar las caries en niños son:
- Cambio de color en el diente: la pieza dañada presenta cierta decoloración o manchas blancas y, según avanza el estado de la caries, estas se vuelven más amarillentas, marrones o, incluso, negras.
- Dolor leve o agudo: al morder o consumir alimentos y bebidas.
- Aparición de mal aliento.
- Sensibilidad dental al frío y calor.
- Inflamación y abscesos.
- Dolor repentino: sin causa aparente.
- Pequeñas cavidades: que se forman de color oscuro en los molares.
- Pérdida o rotura del esmalte dental.
Si nos encontramos ante alguno de estos síntomas, es posible que la caries ya esté bastante avanzada. No obstante, la primera señal a tener en cuenta son las manchas blancas, ya que la caries no está tan desarrollada y aún es posible llevar a cabo un tratamiento conservador.
Si la caries se encuentra en un estado bastante avanzado, la lesión causará intensos dolores y podría afectar al esmalte, la dentina o, incluso, al nervio dental, en los casos más severos.
¿Cómo se pueden prevenir las caries?
Realizar una serie de buenos hábitos de higiene oral es importante a la hora de prevenir la caries dental. Aunque la clave está en enseñar a los niños a cuidar de sus dientes, llevando a cabo las siguientes prácticas:
- Disminuir el consumo de azúcares: reduce las probabilidades de sufrir una caries. Se aconseja evitar el consumo de bebidas y alimentos azucarados, sobre todo aquellos que son más viscosos, puesto que permanecen más tiempo entre los dientes.
- Una dieta sana y equilibrada: hay que promover el consumo de alimentos crudos y ricos en fibra y calcio.
- Evitar que el niño se duerma succionando el biberón.
- Higiene bucodental adecuada: hay que enseñar a los niños la importancia de llevar a cabo un cepillado diario después de cada comida, durante, al menos, dos minutos. Hacer uso del hilo dental, una pasta de dientes con flúor y un enjuage bucal, si el odontopediatra lo recomienda.
- Acudir al dentista regularmente: al menos, dos veces al año. Una revisión periódica ayuda a mantener un buen estado de salud bucodental y prevenir la aparición temprana de caries.
