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Al igual que sucede con los adultos, es recomendable que los niños acudan al odontopediatra -dentista enfocado en el cuidado dental infantil- cada seis meses aproximadamente.

Así, este profesional podrá realizar una revisión de sus dientes y encías. Y, con ello, comprobar si su estado de salud bucodental es el adecuado.

En el caso de que no lo sea, la revisión será especialmente útil, ya que podrá tratar cualquier afección de la boca en una fase temprana.

¿POR QUÉ ES RECOMENDABLE ACUDIR A REVISIONES CADA SEIS MESES?

En este punto, es conveniente destacar que la periodicidad de las revisiones deberá ser establecida por el profesional que trate al niño.

Es decir, es posible que, por el motivo que sea, el odontopediatra paute una frecuencia mayor o menor.

Si no se ha establecido una periodicidad concreta, desde las clínicas dentales Moonz recomendamos llevar al niño al odontopediatra cada seis meses. 

Esta necesidad de llevar a los niños al odontopediatra se debe a dos motivos principales:

  • Para llevar a cabo un tratamiento preventivo:

Mediante una revisión, el profesional puede determinar si el paciente requiere una limpieza bucodental básica o un tratamiento con flúor para remineralizar el esmalte. También es posible que el estado bucodental del niño sea óptimo y no necesite someterse a ningún tratamiento.

  • Para la detección y el control precoz de distintas patologías:

La caries es la enfermedad bucodental más común en la población infantil. Y, por ello, las revisiones rutinarias con el odontopediatra son fundamentales para detectar esta, o cualquier otra afección. Y, por supuesto, para pautar el tratamiento que acabe con ella.

¿DESDE QUÉ EDAD SE DEBE ACUDIR AL ODONTOPEDIATRA? ¿Y HASTA CUÁNDO?

Lo más recomendable es que la primera revisión con el odontopediatra se produzca a los tres años.

Tras esa primera consulta, el profesional establecerá la pauta de revisiones más correcta para el niño. Pero, tal y como hemos señalado previamente, la norma general es que dichas revisiones se produzcan cada seis meses.

Una vez que el niño haya cumplido los catorce años, lo más recomendable será que dichas revisiones sean realizadas por un odontólogo general -profesional enfocado en el cuidado dental de los pacientes adultos-.

MI HIJO LLEVA ORTODONCIA, ¿NECESITO LLEVARLE TAMBIÉN AL ODONTOPEDIATRA?

Hoy en día, hay una gran cantidad de niños que llevan ortodoncia. Muchos padres que anteriormente estaban acostumbrados a acudir al odontopediatra dejan de hacerlo cuando sus hijos comienzan el tratamiento ortodóncico.

Esto se debe a que piensan que, dado que van a acudir a consulta con el ortodoncista durante un período continuado de tiempo, este profesional también realizará una revisión odontológica.

Sin embargo, la realidad es que no es así. El ortodoncista se centrará en el campo que le concierne.

Es decir, las revisiones llevadas a cabo por el ortodoncista estarán enfocadas en los movimientos de los dientes o los huesos del niño y en el progreso del tratamiento.

Sin embargo, hay ciertas patologías o tratamientos que, siendo muy necesarios, se encuentran fuera de su área y pueden pasar inadvertidos. Esto, por ejemplo, puede suceder con la caries o con procedimientos como las pulpotomías o las tartrectomías.

Por este motivo, lo más recomendable es combinar el trabajo de ambos profesionales: el odontopediatra y el ortodoncista.

De esta manera, los padres se asegurarán de que sus hijos gozan de una buena salud bucodental en todos los aspectos. Y, en caso de que se produzca alguna alteración en ella, esta podrá ser tratada en su fase inicial.

Javier Girón de Velasco

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