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Con frecuencia surge la duda entre los pacientes que acuden por primera vez a una consulta de ortodoncia: ¿duele la ortodoncia? Lo cierto es que la ortodoncia puede causar pequeñas molestias. Por ejemplo, al colocarse el aparato, se pueden sentir algunas molestias en la cara interna de los labios y una mayor sensibilidad en los dientes al morder. Por eso es clave mantener una higiene regular, realizando enjuagues bucales, que aliviarán esas molestias.
Los tratamientos en edad temprana generan pocas molestias porque los niños tienen una gran capacidad de adaptación y además su estructura ósea aún no está consolidada. Al ser esta más flexible los movimientos son más rápidos y sin apenas molestias se consiguen muy buenos resultados.
En adultos se pueden dar casos aislados de dolor más intenso, dolor de cabeza leve o irritación en labios, mejillas o en la lengua, aunque no son habituales. En cualquier caso, estas molestias no durarán más de 1 o 2 semanas. Cuando se dan pequeñas molestias, son momentos breves que se olvidan pronto, sobre todo cuando se ven los resultados.
