- Cepillarse siempre los dientes tras una comida, durante el día, y por la noche antes de acostarse;
- Dedicar el tiempo adecuado a esta tarea, es decir, al menos 4 o 5 minutos;
En cuanto al método, te recomendamos los siguientes pasos:
1.- Cepillado circular externo
Al igual que en un cepillado normal la primera pasada debe realizarse sobre la cara externa de los dientes. El cepillado debe hacerse realizando movimientos circulares y suaves del cepillo sobre cada pieza dental, es decir, cada diente o muela.
El cepillo debe posicionarse en perpendicular a los dientes, con las cerdas del cepillo situadas horizontalmente. De este modo se va eliminando la suciedad más superficial de los dientes y del aparato.
Conviene dejar pasar el cepillo ligeramente sobre la encía para masajearla: esto permitirá una mejor circulación de la sangre en la encía, que de este modo se hará más fuerte y cumplirá mejor su función de abrigo del diente.
2.- Cepillado horizontal externo
Tras esta primera pasada debe pasarse el cepillo en movimientos horizontales en el hueco existente entre el aparato de ortodoncia y los dientes. Se deben ir pasando las cerdas entre los brackets y el diente, tanto por debajo como por encima. De este modo, se limpia todo el aparato de ortodoncia.
3.- Cepillado de la parte oclusal
El siguiente paso es cepillar la sección oclusal de los dientes, es decir la parte superior de los dientes inferiores y la parte inferior de los dientes superiores. Este cepillado debe hacerse con las cerdas del cepillo posadas sobre la cara oclusal de los dientes y en movimientos horizontales tanto en la parte superior como inferior de la boca.
4.- Cepillado de la cara interna
Después, debe cepillarse la cara interna de los dientes. Debe situarse el cepillo de dientes en perpendicular a la cara interna de los dientes y realizar movimientos verticales, de arriba abajo cuando se cepilla la parte superior y de abajo a arriba cuando se cepilla la parte inferior. Debe aplicarse este método en todo el interior de la estructura dental.
5.- Lengua y paladar
Finalmente, debe cepillarse la lengua y el paladar. El movimiento debe ser suave y su función es limpiar la parte interna de nuestra boca, donde siempre quedan pequeños residuos de alimento ya que es donde se produce el proceso de masticación.